La perfección no existe, y la sublimación no es una excepción. Como ya vimos en Los 3 problemas comunes en la sublimación, son varios los problemas que pueden aparecer en el proceso. Hoy vamos a profundizar en el que puede convertirse en nuestro peor enemigo durante la impresión: el banding.
El banding es un fallo de impresión protagonizado por la obstrucción de los cabezales, que provoca que aparezcan líneas horizontales en el diseño. La obstrucción de los inyectores se produce porque las tintas, con el tiempo, se secan. Cuando eso sucede, los inyectores se obstruyen, interrumpiendo el flujo habitual de tinta. De esta obstrucción aparecen bandas sin tinta en la impresión (muy chulas como diseño abstracto, pero nada graciosas para tu trabajo).
¿Cómo evitar el banding?
- Imprime con regularidad: realiza impresiones cada pocos días para evitar que los cabezales se obstruyan.
- Comprueba que la impresora tiene suficiente tinta. A ver si nos estamos volviendo locos y el problema es que se te ha gastado la tinta.
- Realiza limpiezas de inyectores: algunas impresoras lo hacen de forma automática, pero otras como las Epson son manuales y deben realizarse con regularidad.
- Aumenta la calidad de impresión al máximo, en caso de que ninguno de los pasos anteriores te resuelva el problema.
En principio, estos pasos deberían ser suficientes para evitar que tus imágenes se rayen (aunque problemas tenemos todos). Si lo has probado todo y sigues sufriendo banding, ¡contacta con nosotros!